Amigos, amor, chat, entretenimiento… en fin, los juegos online son una forma de salir del mundo real e involucrarse en el abierto sistema cibernético, crear un universo propio manipulado por el usuario. El nombre del juego es Habbo hotel, el objetivo no es ganar sino tener amigos y adquirir prestigio en la sociedad virtual.
Para hacerlo el personaje debe demostrar ser alguien adinerado por lo que se ha creado dos tipos de monedas virtuales, los pixeles que son las propias monedas del juego, y los Habbo créditos que se obtienen comprando con dinero real. Estas monedas se diferencian porque si un jugador tiene sólo pixeles automáticamente se convierte en alguien pobre, pues para pertenecer a la alta sociedad debe tener una mínima cantidad de Habbo créditos.
Según la página web http://www.habbo.es/help/50, que responde las inquietudes de los usuarios, “Tener una sala propia en Habbo es gratis. Sin embargo, si se quiere comenzar a decorarla, se necesitará comprar Furni(objetos para decorar). En ese caso necesitará tener antes Habbo Créditos en tu cuenta.”
Se pueden adquirir 8 créditos a través de un código que debe ser introducido en el sitio web y este se obtiene enviando un mensaje, a las operadoras de Movistar y Alegro en Ecuador, que equivale a $1,04. Por otro lado, se pueden conseguir 60, 145 o hasta 290 Habbo créditos pagando con las tarjetas Visa, American Express, Visa Electron, Master Card o Diners, tienen un costo de $14, $35 y $70 respectivamente.

Tiempo es otro de los factores que se invierten en este juego. Los que se sienten más atraídos, y pueden terminar atrapados en el mundo cybernético, son chicos y chicas de 12 años en adelante.
El sociólogo Héctor Chiriboga afirma que este tipo de juegos alienta ciertas habilidades en el uso de la tecnología, pero por otro lado, genera un desperdicio de tiempo del individuo. “Lo que se coloca más en un lado termina descompensándolo del otro lado” dijo.
Alejandro Ojeda, de 13 años, ha hecho de este juego su pasatiempo favorito. Llega del colegio a las 14:00 y luego de comer, lo primero que hace es encender el computador para ingresar al juego. Durante un día ha pasado hasta 6 horas o más inmerso en la vida de Habbo, dejando a un lado sus responsabilidades académicas, apartándose por completo de la sociedad real; es decir de sus padres, hermano, amigos.
“De alguna manera ciertos individuos que estén relacionados con tecnología eventualmente, no la gran mayoría pero si algunos, pueden terminar aislados de grupos sociales de referencia básicos con los que iniciaron su proceso de socialización”, explica Chiriboga.
“Ya mismo” es la respuesta de Alejandro cuando su mamá le pregunta si ya ha realizado las tareas del colegio, mientras él permanece concentrado en lo que hay dentro de su nuevo mundo con el apodo de Ale13.

Conversaciones sin sentido son la que se pueden encontrar en el juego. Todos los integrantes tienen la libertad de decir lo que deseen y en el momento que quieran. Niños, jóvenes y adultos se sumergen en el universo virtual a través de un personaje que tiene vida propia y que hasta cierto punto terminan adueñándose de la vida de los mismos jugadores.
La tecnología avanza a pasos agigantados, días atrás escuche a una amiga de mi hermano que pasa la mayor parte del día frente al computador chateando o juegando via online. A ella la televisión le parece aburrida y prefiere relacionarse con sus amigos por medio de la web. Considero que las redes sociales se ha apoderado de los jóvenes y en muchas ocasiones fomenta la vagancia
ResponderEliminaryo pienso que por un lado esta bien a que el mundo virtual para muchas personas es algo importante y el cual los hace sentir ellos mismos!!! y si fomenta vagancia mmm pues creo que no solo que muchas personas dejan un poco sus obligaciones para poder sentirse ellos estando en un juego conociendo gente!! NT
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